No me gustan los chicos que coleccionan chicas, pero tampoco los que no saben hablarle a una. No me gustan los que me dicen que quieren cogerme así de una, pero tampoco los que aletargan el tema durante semanas o meses. No me gusta que me quieran ver todo el tiempo, pero tampoco me cabe que les pinte verme una vez al mes. No me gusta que nunca elijan un lugar para salir, pero tampoco que lo elijan siempre. No me gusta que se tomen todo lo que digo al pie de la letra, totalmente en serio, pero tampoco que ni siquiera me tomen en cuenta o todo lo tomen a joda. No me gusta que se rían de las cosas que para mí son importantes o me digan que son una bobada, pero tampoco que me dejen comerme la cabeza con giladas si saben mi tendencia a rayarme por todo. No me gusta que me sobreprotejan o pretendan elegir por mí, pero sí que me aconsejen y me cuiden cuando claramente no sé qué estoy haciendo. No me gusta que me cubran de regalos o palabras bonitas sin contenido, pero tampoco que no tengan un puto detalle de cualquier tipo.
Yo sé que soy una desequilibrada de porquería y que tengo mil fallos, pero creo (CREO) que sé mantenerme en el punto medio de todo esto que acabo de mencionar. Y que merezco exactamente lo mismo que esto que doy, ni más ni menos.
No mylove, no es que porque te quiero ver estoy enamorada, no es que porque activo yo es que estoy re manija, no es que porque te busco para coger estoy obsesionada con tu pija. Solo es que si vos no hacés nada, algo tendré que hacer yo. Hasta que me canso, y ahí es cuando desaparezco, y si nunca aprovechaste que estuve, qué sé yo, ¡jodete!.